Retrasar la progresión del deterioro cognitivo, para mejorar la calidad de vida del paciente, retrasando de esta forma, la institucionalización.
Toda esta mejora en el paciente supone además una disminución de la carga del cuidador.
Retrasar la progresión del deterioro cognitivo, para mejorar la calidad de vida del paciente, retrasando de esta forma, la institucionalización.
Toda esta mejora en el paciente supone además una disminución de la carga del cuidador.